Estás perdiendo dinero si tu web es solo un folleto digital bonito. Si la gente te visita pero no compra, no reserva o no se convierte en cliente, tu web no funciona. Es un gasto, no una inversión. Eres un experto en tu oficio, no en convertir clics en dinero.
Tu web debería darte dinero. Si no lo hace, está rota. La mayoría de los dueños de negocios artesanales se enfrentan a los mismos problemas que matan sus beneficios: una web que no vende, una presencia online que nadie encuentra y tareas operativas que les hacen perder un tiempo muy valioso.
Para arreglar esto, no improvisamos. Usamos El Triángulo de la Alquimia: nuestro sistema patentado de 3 partes, diseñado para convertir tu web en una máquina de captar clientes.
Cada parte del triángulo soluciona un problema crítico de negocio:
1. CREATIVIDAD: Hacemos que la gente desee tu producto.
2. VISIBILIDAD (Discoverability): Ayudamos a que los clientes adecuados te encuentren.
3. INTEGRACIÓN: Hacemos que tu web gestione el negocio por ti.
Contamos tu historia y diseñamos tu web para que la gente sienta que necesita tu producto. Nuestras webs están construidas para una sola cosa: vender. Usamos palabras potentes y un diseño atractivo para que comprarte a ti sea la única opción lógica.
Ponemos tu negocio justo delante de las personas que están dispuestas a pagar por la calidad. A través de marketing inteligente (tanto de pago como orgánico), nos aseguramos de que cuando un cliente de alto valor busque un producto como el tuyo, te encuentre a ti primero.
Construimos webs que se encargan del trabajo pesado. Tu página gestionará los pedidos, las reservas y los pagos de forma automática. Esto te libera del ordenador para que puedas volver a hacer lo que amas: dirigir tu negocio y crear productos excelentes.